domingo, 15 de julio de 2007

Historias de cronopios

Buenos Aires, como decía Julito, te puede recibir o bien como cronopio o bien como fama. No es una cuestión de suerte , si no más bien de conciencia. Es por eso que la mayoría de los que todavía no conocen la Capital Federal y sus costumbres genéricas de caos e indiferencia adoptan un sentimiento cronopio permanente durante al menos un par de días despues de su llegada a la ciudad.
El lunes 9 Julio, una ingente cantidad de cronopios aterrizaban en Ezeiza, aunque ya convertidos en cronopios-cronopios, es decir, en cronopios dobles. Pronto se empezaron a amontonar en la oficina de reclamaciones de las Aerolineas Argentinas exigiendo sus valijas perdidas en el universo incomprensible de los cargadores de maletas, llámense también cocteleros porfesionales y acumuladores de equipajes. La especialidad de su arte radica en que durante el goteo de valijas por la cinta transportadora no pase ninguna del vuelo correspondiente y sin embargo, pasen otras tantas de procedencia impredecible. Es decir, supongamos la llegada de un vuelo del día 7 de julio, que en la realidad bonaerense llega un 9 de julio ( cuestiones de abstracción y agujeros negros en el cielo, no pensar demasiado, hay que tener en cuenta , además del cambio de franja horaria, el cambio de hora inherente a las propias compañías de vuelo, con una concepción espacio temporal propia y con necesidad de unos parámetros individuales para el cálculo. De ahí su impredecibilidad.) , pues bien, para ese vuelo, las valijas van atravesando el tranportador cinco o seis veces ante los ojos del pasajero, nadie detecta la suya porque todas son de vuelos tres días anteriores o bien tres posteriores pero nunca del mismo día del vuelo. En la oficina, las hojas de reclamaciones se
amontonan mientras la atmósfera se carga de palabras dardo contra las madres de los aerolineros que tienen sus oidos preparados para ponerse en modo off ante estas situaciones habituales.

Durante los días siguientes, todavía será dificil dejar de ser cronopio, simpre y cuando decidas recorrer la ciudad hablando un castellano sin acento criollo. Esto se hace todavía más relevante en el momento de pago, pues además del cambio de moneda, cambia la concepción del cambio. Es decir, si usted es extranjero y toma, por ejemplo, un café con medias lunas de valor en carta de 6$ y paga con un billete de 20$, la devolución será indefectiblemente de 4$ y si a usted, asombrado ante el aparente descuadre de cuentas, se le ocurriera protestar, será inmediatamente abatido mostrándole antes sus ojos el libro de leyes y aceptación de entrada al país de extranjeros , en el cual se subraya cuál será el sistema de pago y devolución para el no criollo.

Hete aquí algunas de las dificultades que puedan surgirle en los primeros días de estancia. Todo ello, por no venir concienciado y aprendidito de casa. Por eso, desde aquí le sugerimos revise el libro " consideraciones y conocimientos previas para entrar en la Capital Federal" en la cual se resume la actitud a tomar para el inmigrante y algunas leyes porteñas´básicas desconocidas para el extranjero.

Pero no todo son problemas en el país. Una vez aceptada la discordia y el cambio de percepción en el unvierso porteño, periodo de tiempo más corto para un español que para cualquier otro europeo, todo se teñirá de otro color cuando el mesero ponga antes sus ojos un bifé de chorizo con papas fritas desbordando el plato o bien cualquier especialidad a la parilla o asado. Pero sobre todo, si usted tiene la suerte de conocer a la familia Linares (aahí esos medio galleguitos) que son el sol de la ciudad de Buenos Aires, su estancia no podrá ser más cálida y acogedora. Por eso desde aqui les quiero dar mil gracias a estos locos que me hicieron pasar una estancia increíble y en especial a jorgito morrison, el chamuyerito más lindo de la ciudad. Para ellos, un beso enorme .

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Lucia!!!Gracias por los halagos, te espero a la vuelta para que sigas conociendo las maravillas de la Pcia.de Bs.Bs, besos chamuyerita!!

Jim.

Anónimo dijo...

Me mola tu rollo!! ¡Hasta leyéndote se te nota ya el nuevo acento! Mira a ver si te traes también un poquito de algunas de esas virtudes que parece tener la gente estupenda que estás conociendo.
Aunque la verdad es que me cuesta pillarte. ¿Puedes escribir algo para la gente que no sabemos lo que es un cronopio? Vamos, que yo lo que extraigo de la parrafada es que te han retrasado el vuelo, te han perdido las maletas, te han timado en el primer bar que has entrado :P, pero que la gente es la caña y que como sigas comiendo esos pedazo de filetones, se te va a poner un culoooooo... jeje
Besos de tu tato.

Anónimo dijo...

tronkoooooooo¡ pues lo has pillao todo¡ que loco¡ jajaja. Y si quieres saber lo que es un cronopio leete el libro de cronopios y famas de cortazar...no seas vago cartulindron¡¡¡

Un besico desde El Bolson y otro para el pá

Anónimo dijo...

Aguante!!!!

Jaja, buena descripción de Buenos Aires!!! Y de Jorge!!! aguante el chamullo!!!!

Abrígate bien!!! Y seguí disfrutando!!!

¡¡¡¡¡¡Me muero de envidia!!!!!!

Jotikas

Anónimo dijo...

Por lo que veo te va bien por zonas australes. Parece que no pasas frío. Yo volví a London tras muchos años de mi primera visita y me encantó (vuelos y aeropuertos aparte). Sigue comunicando please
El Pá

Anónimo dijo...

Torpeda!!!! La viole dice k eres un fenomeno!!!Me encanta tu descripcion de las cosas, dejas tu firma y tu huella..y el pueblito hippy, kiero estar ahi!!! k perruna, difruta como solo tu sabes y empapate de esa cultura, al vuelta te espero para k me cuentes lo incontable! Por cierto vayas donde vayas siempre sales con la cara de patata en las fotos, no se como lo haces!!!Abrigate y informanos. Aupa!esa super toalla vileda!!un besico boluda!!!
Recuerdos de la familia Quiñones!!

Anónimo dijo...

Aviso para navegantes, en wikipedia se encuentra todo lo que necesitas saber sobre cronopios y no te tienes que atrever a preguntarlo.
El pa